Experiencia nueva recomendada por un cliente. Uno de esos lugares que no sabes que existen si no te hablan de él. Super atentos en el servicio, tiene mucho mérito hacer este nivel de cocina en una cocina reducida. Olé. He probado sabores y texturas nuevas y el brioche espectacular. Muy interesante
Ambiente peculiar al estar situado en unas galerías de alimentación, pero muy logrado, se está agusto.
Personal muy amable, sonriente, explicando cada plato al detalle.
Nos encontramos con una mala sorpresa, ya que íbamos a Menú Degustación de 35€ que en la web tienen anunciado con 5 platos y allí te dicen que son 4 (creo que si el cliente se da cuenta de esto y te lo dice, debes tener un mínimo detalle... poner una pequeña tapa a probar... no cobrar el pan... Pero es solo mi opinión)
Los platos estaban ricos, muy sabrosos, especialmente me gustó la ensalada de burrata, higos y chocolate, el ceviche de corbina y la costilla. Lo que menos, las albóndigas.
Para terminar te ofrecen un chupito de mojito hecho por ellos.
Si te gusta ir a Menú cerrado (sorpresa) no es mala opción ya que, los platos son correctos y el precio no es muy excesivo.
El conjunto está bien, aunque no habría quitado el 5° plato del menú.
Retaurante diferente situado en un puesto de mercado pero tienen mesas en espacios lo que lo dotan de suficiente comodidad. Comida elaborada y muy bien presentada. Comimos el menú largo y todo vuelo, su ceviche de atún... aunque lo que más me gustó fue su postre de chocolate. En cuanto al servicio hay que adaptarse al cliente ya que si este tiene prisa hay que acelerar en lp posible, no lo hizo. Precio alto pero acordé a lo ofrecido
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