Local que merece la pena visitar en Avilés. El menú degustación que probamos estaba excelente, cuatro platos y un postre elaborados con mimo y con excelente producto. El servicio muy amable y atento, el único pero que les pongo es la lentitud en atendernos, tomarnos nota de la bebida y el ponernos un entrante de cortesía para ir haciendo tiempo, después mejoró el ritmo entre platos, aunque siguió siendo lento para mi gusto. El local está decorado con buen gusto, con una estética moderna y elegante. También se agradece que esté conectado el sistema de ventilación para tener un ambiente agradable y no simplemente de decoración para cumplir la normativa del ayuntamiento. Pese a la lentitud del servicio, recomiendo que os acerquéis a probar la experiencia porque seguramente haya sido un hecho puntual.
Ha sido un gran descubrimiento. Restaurante muy acogedor, excelente cocina y un magnifico servicio. Nos ha encantado todo lo que hemos pedido. Lo mejor de Avilés. Repetiremos sin duda.
Interesante descubrimiento de este local avilesino, con una decoración clásica y modernista acertada. Acceso peatonal y atención exquisita. Prepara unos menús degustación, con maridaje de vinos, muy acertados e interesantes y a un precio ajustado. Estos menús se cambian cada dos semanas y resultan atractivos; en los panes, de distintas variedades, quizas falte uno tradiciona. Lugar recomendable.
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