Taberna Marinera con encanto en este precioso pueblo pintoresco y de playas de ensueño. El restaurante es una coqueta casa de piedra que cuenta con dos comedores interiores (arriba y abajo) y un balcón adornado con flores en el que disfrutar de ese olor a mar que inunda sus calles.
Es de esos lugares de toda la vida famoso por sus arroces que probamos en nuestra anterior visita (vieiras, bogavante...) Y por ofrecer pescado del día fresquísimo y de una calidad inigualable.
Destacamos la calidad del producto y su sencillez en la elaboración; cuando algo es bueno, no hacen falta florituras.
Lubina espectacular de carne tersa, frescura y sabor en cada bocado acompañada de ensalada y patatas. Ración generosa de bacalao y para completar navajas, pimientos de Padrón y calamares a la plancha. Los niños comieron pulpo y solomillo a la plancha. Postres caseros y café de pota, qué más se puede pedir?
Si os acercáis por allí, no dudéis en ir a disfrutar de la gastronomía gallega y de los mejores productos que nos ofrecen nuestras costas.
Àngela Martinez García
+5
Sitio muy agradable y la comida espectacular. Muy buen servicio.
Probamos el Sargo que nos recomendaron. Las zamburiñas estaban riquísimas y el pulpo también. Nos recomendaron buen vino blanco. Lo recomendaríamos 100%.
Muy buena experiencia en el restaurante de Javier.
Estuve comiendo con mi mujer y salimos muy contentos, no fue una comida barata, pero pagamos la gran calidad de los productos que comimos.
El pulpo estaba espectacular y la parrillada de pescado estaba en su punto.
Muchas gracias por la atención, volveremos.
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