Estupendo rodaballo para compartir fuera de carta, con unas alcachofas rebozadas con jamón de entrante y de postre tarta de queso al horno con helado de fresa y tejas de guirlache de almendras con helado de avellana. Genial. Una comida muy buena, el rodaballo al horno muy sabroso y los postres sorprendentes.
Al principio todo parecía ir bien, pedi lo básico pa cenar a gusto, un pincho de tortilla rellena y unas bravas además de dos pintas frescas y burbujeantes que me sentaron de vicio con la medicación que tomo.
Al final la experiencia fue totalmente recomendable.
La comida deliciosa. Y las camareras auténticos Ángeles caídos del cielo.
Da gusto que te acojan tan bien.
Tu Pimpollo volverá por allí cuando menos te lo esperes.
Que puede ser mañana
Mª Jesús Sánchez Pérez
+5
Para repetir una y mil veces, uno de los mejores sitios para comer en Logroño, decoración muy bonita, carta variada a buenos precios y de calidad. Unos postres caseros originales, generosos y sobre todo riquísimos (¡ojo al cremoso!)
Hemos estado varias veces y sin duda volveremos.
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