Restaurante de comida tipo americana. El local es chiquitito y se sitúa en pleno barrio de Chueca. Como comentario positivo, los platos son grandes y están muy buenos, pero los precios son megaexagerados. Fuimos un domingo y resulta que tenían una oferta de las hamburguesas al 50% y el resto de platos (menos postres) al 30%. Con ese descuento, ya se quedan con precios normales.
Nos pedimos: nachos para compartir, y una hamburguesa cada uno, una crispy chicken y una quesuda. Las dos estabsn muy ricas. En cuanto a la quesuda, para mi gusto, sabe demasiado a un queso azul que le ponen, quitándole la gracia, pero para gustos colores.
Pasamos un poco de frío comiendo, pero la atención del personal fue muy muy buena. Personalmente no creo que vuelva, pero está bien, eso sí, con los descuentos.
Es un restaurante pequeño, con 7 u 8 mesas, pero acogedor.
Nos sentaron bastante rápido y nos informaron de las ofertas que tenían en carta según nos tomaron nota de la bebida.
Todos los platos son súper grandes, no de mala calidad. Recomendaría compartir entrantes, nos parecieron muy ricos.
La verdad que por las reseñas que leí tenía mis dudas sobre ir a probar este sitio, la atención y el lugar ( sin mentir ) ha sido lo que más me ha agradado de todo. Hemos pedido los nachos que estaban alrededor de los 10€ y el pepito para compartir entre 3 personas unos 24€ aprox, tenían un descuento del 35% para todo excepto postres y bebidas. No sé si otros días de la semana no tienen el descuento pero espero que sí porque si no, si que los precios son muy elevados. Los nachos estaban ricos y originales, mucha cantidad. El pepito, a pesar de ser bastante cantidad recomendaría que le pusieran menos salsas, y más carne en vez de patatas y queso. El sabor de la carne estaba rico. El local limpio, acogedor, buen ambiente lo recomendaría para ir a picar y tomarse algo, pero hay que mejorar el equilibrio de los ingredientes respecto al precio.
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