Visitamos el restaurante en nuestro paso por Nigrán. La realidad es que la comida fue espectacular. Desde el pan que sirvieron, hasta el resto de platos. Todos exquisitos y con el punto perfecto. Probamos zamburiñas, gambones, pulpo y solomillo de vaca. Todo con el punto perfecto para comer y sabroso. La calidad de la materia prima así como de la elaboración de 10. Nos atendió una camarera que escuché que se llamaba Paula, fue muy amable en todo momento y muy atenta, se agradece mucho un trato así. Estuvimos en la terraza cubierta, pudimos entrar con nuestro perrito, aunque el dueño nos dijo que lo permitió solo porque era un día tranquilo.
Un restaurante exquisito con doble ambiente, algo que se agradece por el calor que está haciendo. La comida y el servicio de la mejor calidad, uno de los mesoneros Manuel, 20 puntos, nos recomendó los platos y todos muy buenos. No logre sacarle foto a los entrantes porque arrasaron del hambre que teníamos.
Venimos de Lanzarote de vacaciones.El trato es de 10, el personal muy amable,pedimos zamburiñas,navajas, gambones,tabla de quesos y todo espectacular. Pero cuando pedimos el atún fue otro nivel,el punto perfecto,sabor exquisito. Los postres caseros también muy bueno. Volveremos gracias por todo
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