Joya escondida a la que merece la pena llegar. Personal amable y simpático, buen ambiente dentro del local. Dispone de una terraza exterior muy amplia. Variedad en cervezas, comida preparada al instante con buen gusto y las patatas fritas son caseras. Precios económicos.
Seáis o no de la zona tenéis que ir a llevaros la buena sensación que yo me lleve.
Llegamos aquí de casualidad, desde orbaneja del castillo, huyendo un poco de los restaurantes masificados. Para nuestra sorpresa, un cachopo y una hamburguesa espectacular a precio decente. Un servicio muy decente con gente joven. Una ubicación privilegiada y muy fresquita. Eso sí, mucho jaleo interior en el momento en que empieza a llenarse. Quizás fue mala suerte que se juntasen varias familias con niños pequeños por allí sueltos y gritando ese día. Aún así, repetiría. La comida lo vale.
Lo encontramos por casualidad con el navegador de Google y nos fiamos de sus valoraciones y no nos defraudó. Es un buen sitio para comer o cenar algo si te pilla cerca. Calidad precio buena. Las hamburguesas con patatas fritas muy ricas, os las recomiendo. A los niños les gustó mucho. Y las camareras muy majas y atentas. Totalmente recomendable, sobre todo si vas con niños o adolescentes
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