Buena oferta y variedad, y muy buena atención. Tienen distintos menús al mediodía día (ademas de menús degustación cualquier día), y nosotros elegimos el menu Fujiyama de 34€, con 4 entrantes, un principal, 1 bebida (donde puedes elegir por ejemplo buen vino o cervezas japonesas como la Kirin o Sapporo) y postre o café. Lo primero que salimos bien llenos con el menú (algunos de los entrantes eran bien contundentes/grandes) , y todo el producto se notaba que era de calidad, con mezclas y potencias de sabores, además de preparado con cierto mimo. Para mi gusto si que es cierto que la tempura que preparan (tanto en el entrante de pato en tempura o la bola de helado de coco en tempura), le tendrían que dar una vuelta, demasiada masa gruesa, que hace que casi ni se note el producto principal, y quede en cierto modo algo grasiento. La atención de 10 (de hecho en la ración de gyozas una vino vacía, y sin ningun problema lo solucionaron e incluso volvieron a traer la ración completa, chapeau!). Y el local decorado con gusto y transmite tranquilidad. Además tienen el detalle de poner una "tapa" mientras esperas, a pesar de que el servicio fue muy bien y rápido, estando atentos y trayendo los platos en su tiempo, según se iba comiendo Relación calidad precio genial, y recomendables sus menús ejecutivos.