Restaurante muy coqueto por dentro y con una agradable terraza en una de las plazas más bonitas de Alicante. Me ha encantado el ambiente, tranquilo, con luz tenue, sin bullicio, ideal para compartir y poder hablar mientras comes. Todos los platos que pedimos muy ricos, buena cantidad y servidos con gusto. El personal atento y rápido. Y el precio acorde a lo que comes. Muy recomendable.
![4]( "Recensione")
Es uno de esos restaurantes donde les importa hacerlo bien y para ello intentan cuidar todoslos detalles, se arriesgan y se atreven a crear cosas del estilo: ensalada de burrata, tomate y fresas con salsa de mango o croquetones de gambas super hiper extra crujientes. Bien por ellos!!!!!
Fummetsvan también os recomienda algo tan simple y delicioso como el pan con la salsa de tomate natural i el allioli. Y los postres, que a pesar de que aquí no haya demasiadas sorpresas y sean los de siempre, los que ofrece todo el mundo, los de moda (brownie con helado de vainilla, tiramisú, cheesecake….) tienen por lo menos un ligero toque casero y algun que otro detalle original, como los pistachos o la crema de chocolate líquida del brownie.
Los camareros/as son buenos profesionales, atentos/as y amables. Otro sí.
Y aunque estemos a 28 grados a principios de abril, sed valientes y comed dentro: mesas, vajillas, silloncitos e iluminación perfectas para hacer una más que agradable sobremesa de domingo con vistas a los gigantes ficus macrophyllas de la bella plaza alicantina.
Buen provecho!
La vista desde la terraza es muy linda. El arroz meloso estaba muy bien. No hay muchas opciones vegetarianas pero la ensalada de burrata estaba bien. La torrija estaba deliciosa!! Volvería sólo por ese postre!!
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