Me ha sorprendido gratamente.
El local es sencillo. El piso inferior, donde se encuentra el baño es oscuro y húmedo. Además la luz del baño se apaga cada pocos segundos. Sin embargo, después de esta primera impresión negativa, el balance fue muy bueno. La comida está muy rica y el servicio es bueno y rápido.
En el menú de mediodía entre semana, por 10'50€ comimos un entrante, primero, segundo y postres, con la bebida incluida.
El entrante ese día era un platito de ensalada verde o una copa de zumo de tomate.
El primero podía ser un buen plato de pasta, una sopa entre otros.
En cuanto al segundo nos sorprendió que una de las opciones era una pizza, y no era una ración pequeña sino una pizza entera (ver fotos). Es una margarita y puedes elegir dos ingredientes: champiñones, cebolla, atún, roquefort...
En el menú entra postre o café.
Pizzas muy buenas y variadas, de base fina, muy sabrosas y bien combinadas. El tiramisú excelente. Lugar familiar y acogedor de trato correcto. Muy recomendable.
Agradable sorpresa. Acogedor, buen trato y servicio y la comida muy muy buena.
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