He estado en varias ocasiones y todas ellas he comido bastante bien. Además el sitio es original, amplio y colorido. Hace tiempo que no voy pero todas las veces en las que he estado el único “pero” que le pondría es que una de las camareras (aunque entiendo que con buena intención) se toma tal confianza que en ocasiones para mi gusto roza la mala educación ..
Hemos cenado estupendamente. El servicio muy amable, atento y simpáticos. Tomamos Ensaladilla (floja de sabor), Huevos rotos con langostinos al pilpil (espectacular), Tajín (muy rico) y Costillar a la barbacoa (muy tierno y buen tamaño). El local es muy bonito y grandísimo. En la terraza se está muy bien.
Fue una grata sorpresa encontrar este restaurante por la aplicación de El Tenedor, es una forma de conocer sitios nuevos y esta vez fue un acierto. El restaurante es bastante grande pero acogedor, porque lo han distribuido en distintos ambientes. Nos atendieron muy amablemente , Andrés y Carla, está última nos explicó la carta y nos recomendó los platos que según nuestras preferencias nos podían gustar más y acertó de pleno. La chef, de Venezuela pone un toque caribeño en todos sus platos, pero de forma sutil y además de sorprendente el sabor es espectacular. Los precios están muy bien para la calidad , yo voy a volver seguro. Podéis venir con niños, ya que el local está en una plaza y tiene mesas fuera.
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