Vine recomendado por un amigo y ha sido un gran descubrimiento. Me gustó mucho la carta ya que tiene opciones para todos los gustos. Nosotros fuimos bastante clasicos y pedimos croquetas variadas (jamón y trufa), tortilla, steak tartar y dos chuletones a compartir... estaba todo espectacular. Los postres mas de lo mismo, top! Mención al servicio que en mi opinion fue de 10. La carta de vinos es bastante extensa con opciones para todos los bolsillos y una amplia variedad de vinos con opción de botella magnum. La relacion calidad precio me parece buena, diría que de media es un restaurante de 50€/persona.
He escuchado decir muchas veces que es una de las mejores tabernas de Madrid, pero yo creo que es la mejor, y lo és porque tienen el mejor producto de cada temporada del año, una bodega con una variedad de vinos que te sorprende por su relación calidad precio, un servicio impresionante que te atiende con una sonrisa sincera porque se nota que allí se trabaja a gusto.
Aquí suelo ir varias veces al año, con amigos, con familia, por trabajo, da igual para lo que sea, siempre encuentro alguna excusa para repetir.
El sitio tiene mucho encanto y las tapa están riquísimas; mesas altas para tapear y pequeño salón para comer. En las horas puntas hay mucha gente y no es nada cómodo. En mi opinión…. está un poquito pasado de precio.
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