Una pena que hayan cerrado. Eran muy amables y atentas. Te ponen el café exáctamente como lo pides, aspecto muy dificil de encontrar en casi cualquier cafetería.
Les cerraron porque parece ser que "no tenían salida de humos".
En el metro hay decenas de locales prefabricados de esta cadena y otras tantas (por ejemplo el de Nuevos Ministerios junto a la L8, y también en Avenida de América, al bajar de los buses, antes de bajar a las 6 y 7), y no necesitan salida de humos para funcionar, no guisan. A este paso hasta las papelerías cierran por faltarles salida de humos y claro, así favorecemos siempre a los grandes almacenes en detrimento de los locales y tiendas de barrio, y así siempre perjudicamos al autónomo, que tanto le lleva levantar un negocio.
La verdad es muy tozuda, pero da la sensación de que está todo montado para desfavorecer a los autónomos. Llevan cerca del año cerrados y han desmantelado la cartelería.
Para una cafetería buena que funciona y se la cierran.
Un rinconcito muy acogedor que lleva abierto tan solo un par de meses, donde poder disfrutar de un buen café y un donut rodeado de una estética rosa y vintage. Dispone de un par de barras y unas cuantas banquetas. Tienen servicio take away y la dependienta es muy amable. Se agradece un buen trato al cliente.
Un sitio entrañable donde ir. Si os soy sinceros nunca me e dado el capricho de ir. Me parece excesivo casi siempre voy a la cafeteria de enfrente cafeteria montesa pero la proxima vez ire a tomar algo a ver q tal me tratan....
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