Una cafetería restaurante bastante espaciosa, suele estar tranquilo e incluso se ve a gente trabajando con sus portátiles.
La comida está muy buena y es de calidad, pero tiene unos precios excesivamente caros para la cantidad que sirven.
Prácticamente toda su carta es de comida saludable, como por ejemplo las ensaladas, que tienen una zona con muchos ingredientes a elegir.
Un detalle que está muy bien, es que tienen una buena variedad de aceites y vinagres de distintos sabores (picante, ajo, trufa, limón...) y también de especias y extras (pimienta, sésamo, curry...), para que cojas y te sirvas lo que quieras.
Personal amable que atiende muy rápido.
La atención es muy buena y el lugar está siempre muy limpio. No elijo cinco estrellas porque los precios son altos para la comida que ofrecen. Los sumos no son tan buenos . Los sándwich son más pan que otra cosa. Pero así es la cadena de restaurantes en todos los Faborit es igual. Lo que he pedido que más me ha gustado son las lentejas. El precio es más razonable y están deliciosas.
El café no es barato, pero está riquísimo. Se puede trabajar tranquilamente con el portátil, sitio muy espacioso y tranquilo (salvo en los descansos/comidas, que se inunda de los trabajadores de las empresas cercanas).
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