Un bar de los que no quedan, con musica alternativa, donde de vez en cuando se juntan intelectuales a echar unas partidas de ajedrez y a charlar de rock psicodélico, y la comida espectacular, puro italiano como su dueño, Andrea, un genio que te recomendará los mejores vinos italianos y te ofrecerá unas pinsas romanas (no confundir con pizzas) con sabores muy diferentes a los habituales. Recomendado 100%, un 10 cualquier día a cualquier hora
Lugar tranquilo y acogedor. El propio nombre indica el tipo de sitio al que vas. Variedad de vinos, cerveza fría y tapas frías para acompañar. Un lugar íntimo con buena música y decoración tradicional
Local pequeño.
Buena cerveza.
Ambiente agradable
Típica taberna.
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