Atención muy amable y buena comida. El restaurante está muy bien decorado y tiene terraza. Tienen incluso una salita a parte para celebrar cumpleaños!
No es para nada caro.
Camelot es un restaurante que destaca especialmente por la comida de carne. Hay algunos entrantes y bastantes tapas para picar, y luego de la carta probé el solomillo de ternera que estuvo buenísimo, muy sabroso y tierno. Son 300g, con lo que se puede compartir entre dos personas y a parte pedir patatas fritas y arroz. La ración de arroz es pequeña pero deliciosa. Por último, de postre hay pocos y al menos la tarta de chocolate no es nada del otro mundo. Como recomendaciones de mejora plantearía hacer menús en los mediodías entre semana, y añadir algunos postres típicos como el coulant y/o brownie.
La atención al cliente es bastante buena, atentos y agradables.
El local se encuentra en el camino de son rapiña, no muy complicado para aparcar.
La sala está bien distribuida , los platos que se han degustado sabrosos y vamos a por el postre. En este caso está fuera de carta .
Conclusión un lugar agradable y diferente
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