Es perfecto tanto para ir en familia como con amigos. Es el auténtico restaurante con comida tradicional casera buenísima de primera calidad y a muy buen precio. Siempre que vamos a Tucan II nos sentimos como en casa. Grandes profesionales con un trato excelente. Sus bocadillos son importantes y sus tapas conservan autenticidad tradicional. Recomendado al 300%. Estoy encantada con ese sitio.
Es mi antiguo barrio. Mis padres van muy a menudo y no me extraña: buena comida, buenos precios y un trato excelente. Muy buen servicio.
El local me gusta mucho, la verdad: es totalmente diáfano, un rectángulo enorme con una bonita y sencilla decoración.
El día de Navidad comimos allí (con reserva), todo estaba buenísimo. Todas las mesas decoradas de forma sencilla, pero con gusto. Se llenó, pero hay espacio de sobra para las distancias.
No era la primera vez que iba a comer.
Nota mental: Tengo que ir un día a comerme un bocata y unas tapas.
Los protocolos Covid se cumplieron en todo momento.
Es un bar de los de antes. De comer y beber bien. De ver el fútbol con los amigos y disfrutar de unos entrantes, un plato combinado, un bocata o una hamburgesa.
Sus precios están bien con las cantidades. Sus bravas entran muy bien.
Enseguida te toman nota y te sirven rápido.
Para aparcar por la zona es un poco complicado.
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