La atención es rápida, me hubiera gustado que estuviera disponible pata el cliente un paño para limpiar la mesa si no es un servicio que presten.
El local es pequeño pero cuenta con una terraza que en verano esta de lujo. Tiene un pequeño parque infantil que al estar muy próximo a las cajas permite dejar que los niños jueguen mientras estas en la cola o pidiendo y poder tenerlos controlados todo el tiempo. Los baños son mínimos pero al menos las dos veces que he ido los he encontrado bastante decentes en cuanto a limpieza.
La ultima vez que fui me atendió una señora muy muy amable pero un poco lenta. Hasta el punto que siendo yo el segundo y ultimo en la cola cuando llegué, al momento de atenderme ya se había formado una cola hasta la puerta porque demoró mas de cinco minutos en servir el pedido de los que tenia adelante. Sólo en servir, porque ya les había tomado nota del pedido y les había cobrado. Aun así, pese a lo lento del servicio, vuelvo a destacar la amabilidad y buena disposición de la mujer que nos atendió.
No son muy rápidos, pero junto con el de Kinépolis, es el único restaurante en el que me han servido el Sandy como lo pido
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